Resolución sobre el «cese definitivo» de la actividad armada de ETA.
El pasado día 20, la organización ETA mediante un comunicado hizo saber el “cese definitivo de su actividad armada”.
Declaración del CC de GKB sobre el cese definitivo de la actividad armada de ETA
Esta actividad se había convertido hace ya mucho tiempo, como finalmente ha reconocido la propia izquierda abertzale, en un obstáculo en la lucha de las masas. Las amplias masas, de hecho, claramente avalan un curso de lucha donde sean ellas las que tomen el protagonismo.
El terrorismo individual practicado por ETA, lejos de ser un acicate para la movilización de las masas, sólo servía al Estado para aumentar la represión hacia las masas trabajadoras. Además, dado el nivel de alienación actual, esto alejaba a muchos trabajadores aún más de la lucha, debido a la propaganda de los medios corporativos, la progresiva fascistización de la sociedad, y la criminalización de cualquier disidencia equiparada prácticamente con la “violencia”.
Tampoco cabe disimular el hecho de que la represión de los Estados español y francés, ejercidas de forma combinada, han mermado la capacidad de esta organización hasta límites extremos.
Por otra parte, a la vista de la imposibilidad de la “victoria militar” sobre el Estado, la consecuencia lógica era la que se ha dado ahora.
Esta situación abre nuevas perspectivas para la unidad del pueblo trabajador vasco.
GKB siempre ha defendido que la cuestión nacional no puede dividir a los trabajadores, a la juventud y los estudiantes. Se debe resolver en condiciones democráticas y de igualdad, y por ello defendemos el derecho de autodeterminación, para que en tales condiciones, máxime en ausencia de violencia, represión antidemocrática o terrorismo, puedan expresarse libremente las diferentes opciones nacionales de los ciudadanos, sin que esto pueda servir de base para la exclusión de nadie en función de sus preferencias. Fuera cual fuere el resultado de tal decisión democrática, su solo ejercicio supondría la extensión de la libertad y la democracia no ya para Euskal Herria, sino para la propia España. Por este motivo, es del pleno interés de todo el pueblo tanto aquí como en el Estado.
La desaparición del factor de la actividad armada puede y debe ser aprovechada por los sectores democráticos y revolucionarios, por cuanto la utilización de este hecho ha sido siempre clave en la propaganda reaccionaria.
La clase obrera y otros sectores de trabajadores, deben unirse y luchar por sus intereses y sus derechos, por la democracia y el socialismo, en lugar de enfrentarse unos con otros por motivos nacionales, mientras los capitalistas actúan al unísono o llegan a los acuerdos que necesitan contra los trabajadores.
Se avecinan tiempos de grandes luchas en un contexto de “recortes” (robo al pueblo), empobrecimiento de las masas y los trabajadores en particular, que van a generar graves conflictos sociales.
En este sentido, la propaganda y el trabajo entre las masas serán determinantes a la hora de hacerles comprender que sus intereses chocan con los de quienes han pasado hasta hoy por sus “representantes” de acuerdo solamente con su procedencia o identidad nacional y que la democracia es y exige mucho más de lo que da el Estado Español.
Será necesario estar preparados para ello, y los trabajadores, otras capas antimonopolistas, la juventud y los estudiantes, pueden estar seguros de que contarán con los comunistas, como nosotros contamos con ellos.
